Comunidad: Castilla - La Mancha |
Provincia: Toledo
Municipio: Talavera de la Reina |
Localidad: Talavera de la Reina
Código: TO-CAS-086-VIL
Monumentos militares: Áreas protegidas por murallas en complejos fortificados.
El Primer Recinto amurallado de las Murallas de Talavera de la Reina se encuentran en la localidad del mismo nombre, provincia de Toledo.
Con la dominación musulmana, desde el verano del año 713 hasta la conquista cristiana por Alfonso VI en 1083, Talavera (Talabayra) conoció momentos de gran esplendor, representados por la construcción del primero de los tres recintos amurallados que tuvo a lo largo de su historia, y de su alcázar, construidos ambos en su mayor parte en el siglo X, y mejorados en los siglos XIII y XIV una vez reconquistada la ciudad.
Los otros dos recintos fueron construidos en el siglo XII, uno para proteger un nuevo arrabal, habitado por repobladores cristianos de variada procedencia, que tomaron la ciudad en 1083 liderados por Alfonso VI, y el otro para proteger un arrabal de origen más antiguo.
El Primer Recinto de las Murallas de Talavera de la Reina, mandado construir por Abderramán III en el siglo IX-X, fue levantado siguiendo, probablemente, el trazado de una muralla romana o visigoda anterior. La finalidad de su construcción fue la de formar, junto a la alcazaba, un conjunto defensivo que convirtiera la ciudad de Talabira en una de las numerosas plazas fuertes y fortificaciones que protegían la frontera de los dominios musulmanes durante el siglo X.
Este recinto está delimitado por el río Tajo y el paseo de Ronda, siendo en la parte más cercana al río donde únicamente aparece una cierta ortogonalidad, ya que el resto es más laberíntica. Está representado en el centro del escudo de Talavera.
El material utilizado principalmente en este recinto son sillares de piedra, muchos de ellos reaprovechados de construcciones romanas (hay incluso lápidas de esta época usadas como material) y piedras sin labrar unidas con argamasa. Su planta es rectangular y sus muros alcanzan los 14 metros de altura y 4 de espesor. A lo largo de su trazado se puede constatar la existencia de un buen número de torres de planta cuadrada, y otras semicirculares que constituyen el elemento más antiguo de la fortaleza (siglo IX). Además, la muralla está reforzada y protegida por torres albarranas que se construyeron ya en época cristiana, en los siglos XIII-XIV.
Los abundantes vestigios del Primer Recinto amurallado se conservan actualmente en las calles Carnicerías, Corredera del Cristo, Charcón, Entretorres y Ronda del Cañillo. Han llegado hasta nuestros días ocho de las 17 torres albarranas.
De las cinco puertas que llegó a tener, se conservan los restos de uno de los torreones semicirculares de la puerta de Mérida, mientras que las cuatro restantes (puerta de Pescaderías, puerta de las Cebollas o puerta Nueva, puerta de San Pedro y puerta del Río) se han perdido completamente.
También se conserva el escudo y Virgen gótica que presidían la Puerta de San Pedro, actualmente alojados en la Basílica del Prado.
El Primer Recinto fue construido con sillares y mampostería procedente de construcciones romanas y visigodas.
Se conserva buena parte del Primer Recinto.
Es propiedad del Ayuntamiento de Talavera de la Reina, y se destina a uso turístico.
Es de acceso libre. Más información en la Oficina de Turismo, situada en Ronda del Cañillo, teléfono 925 826 322.
Las Murallas de Talavera han sido declaradas Bien de Interés Cultural.
Bien protegido por la declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 sobre la protección de los castillos españoles (BOE núm. 125, de 5 de mayo de 1949) y por la Ley 16/1985, de 25 de junio, de Patrimonio Histórico Español (BOE núm. 155, de 29 de junio de 1985).
CastillosNet agradece la colaboración de Iván Serrano Martín, Iván Serrano Martín, Luis Carlos Gargallo Martínez, Miguel Ángel Cebrián Martínez