Castillo de Espases en Esparreguera, Barcelona

Situación

Las ruinas del castillo de Espases se encuentran a 410 metros sobre el nivel del mar sobre un cerro en el valle de l'Afrau, en un solitario paraje del término municipal de Esparreguera, a poco más de dos kilómetros de la localidad de Olesa de Montserrat y 45 al noroeste de la ciudad de Barcelona, en la comarca del Baix Llobregar de la provincia de Barcelona.

Se puede llegar desde Olesa de Montserrat por la carretera C-55 hacia Manresa. En el punto kilométrico número 7 hay que tomar la salida a la derecha hacia La Puda (bien señalizada). Tras dejar el vehículo en el llano que hay tras tomar la desviación, hay que seguir a pie. A unos 100 de la carretera asfaltada en dirección al Balneario de la Puda hay un cartel de senderismo de color amarillo que señala la dirección Sant Salvador de les Espases. En este punto ya nos adentramos en el monte por un estrecho camino por el que, en aproximadamente una hora, intuyendo la dirección hacia nuestro destino (desde casi el principio de la senda se ve la que fue capilla del castillo a lo lejos sobre un cerro), llegamos a la ermita de Sant Salvador de Espases y ruinas del milenario castillo.

Historia

A comienzos del siglo IX, un siglo después de la llegada de los musulmanes a la península Ibérica, y tras largos años de luchas y enfrentamientos, se constituyó la llamada Marca Hispánica, una zona fronteriza entre los musulmanes del emirato de Córdoba y los cristianos del reino franco. Las tierras catalanas pasaron a formar parte de este territorio de frontera, y organizadas por el imperio Carolingio en condados gobernados por condes. Para garantizar su frontera meridional frente a los musulmanes, los condados catalanes construyeron entre los siglos IX y XI, y reaprovecharon otros musulmanes, una amplia red de castillos, atalayas y torres de defensa por toda la Marca, fortificando con más de cien castillos un territorio muy extenso que se extendía desde Barcelona hasta el Pallars, en tierras de Lérida. Así nacerían los castillos de frontera catalanes. La Marca quedó estabilizada durante tres siglos en torno al Llobregat, Cardener y la sierra del Montsec. A mediados del siglo XI, con la disgregación del Califato de Córdoba en los diferentes reinos de taifas, los condados catalanes pasaron a ser territorios de avanzada y conquistadores. Los castillos de la Marca estaban emplazados casi siempre en lugares fuertemente estratégicos, sobre cerros que dominaban extensos territorios, controlando los caminos a las principales poblaciones, situados en medio de los valles que daban a las ciudades o pueblos, dominando las poblaciones o el curso de los ríos de la frontera. Contaban siempre con fortificaciones cercanas complementarias que se apoyaban entre sí, constituyendo un eficaz sistema defensivo del territorio en la Edad Media. Actualmente se conservan un gran numero de ellos, muchos en ruinas, otros muy transformados y otros muchos han desaparecido.

El castillo de Espases, construido en el siglo X y documentado por primera vez en el año 985, fue una de las numerosas fortificaciones condales levantadas en las inmediaciones del curso del LLobregat, uno de los ríos que marcó la frontera entre tierras cristianas catalanas y territorios musulmanes de al-Ándalus. Formó parte de las posiciones fortificadas fronterizas del Condado de Barcelona, con territorios musulmanes de la Marca Superior de al-Ándalus.

El castillo sufrió un feroz ataque de Al Andalus en tiempos de frontera entre moros y cristianos de la zona, durante la gobernación del Conde de Barcelona Ramón Borrell. Cuenta la leyenda que los cristianos, desesperados y casi vencidos debido a la superioridad musulmana, pidieron ayuda a Dios El Salvador, quien les envió espadas de fuego desde el cielo para poder derrotar a los sarracenos. De ahí el nombre del castillo, Espases o Espadas.

En 1304 la familia Cardona vende los castillos de Esparreguera y Espases a Pere de Sitjar. Cuatro años después el castillo de Espases es vendido a Pere Sacosta, quien a su vez lo vende a Ramón de Tous a mediados del siglo XIV, en 1342. Posteriormente el castillo se vende a Jaume Vivers, prior de Montserrat.

Descripción

El castillo de Espases fue levantado sobre un cerro en el valle de l'Afrau, próximo al macizo de Montserrat y al curso del río Llobregat.

Estaba formado por un recinto de pequeñas dimensiones y planta irregular, prácticamente inexpugnable por varios de sus flancos.

Dentro de lo que fue el recinto, se conserva la antigua capilla del castillo, la actual ermita de Sant Salvador de les Espases, de origen románico, reformada en el siglo XVI, e incendiada durante los primeros días de la Guerra Civil Española, en 1936. Su actual aspecto corresponde a la reforma efectuada en el siglo XVI, aunque se conserva su muro sur de época románica, formado por grandes sillares.

Junto a la ermita, en la parte más alta del cerro, se observan restos de lo que posiblemente fue uno de los torreones del castillo.

Estado de conservación

Se encuentra en ruinas.

Protección

Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.

Alrededores

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